jueves, 18 de octubre de 2007

LA ESTROFITA PROMETIDA

(Con mucho cariño para mi amiga Sylvia Marrero)


Para hablar de Dios, a los hombres
primero hablas, de los hombres, a Dios;
tú lo sabes Sylvia, no te asombres
porque así lo sentimos los dos.

Le hablas a Dios en tus oraciones
para que los hombres le puedan conocer,
le presentas también tus oblaciones
y es por eso que te has hecho querer.

Yaveh o Jeovah, como querramos llamarle,
sabemos que es el mismo Dios padre Celestial,
lo importante en nosotros es saber amarle
para que Él nos dé la gloria total.

Un poema te ofrecí, y creo estoy cumpliendo
en agradecimiento a toda tu bondad;
gracias querida Sylvia porque ya estoy sintiendo
que entre los dos ha nacido una bella amistad.

Te entrego esta "estrofita" que me pediste un día,
perdona la humildad al brindarte mi aprecio,
sólo quiero decirte en esta poesía
que en nuestra amistad no existirá el precio.
- - - - - - - - -
Mariano Bequer.
Maracaibo, 04/02/05

No hay comentarios: